Nos pusimos manos a la obra y por equipos nos bajamos al patio para buscar, cada equipo donde le indicaba su plano. Corrimos, como gacelas y..... ¡que chasco! no era más que un trozo de papel y además roto.
Al volver a la clase nos dimos cuenta de que todos teníamos lo mismo y si tal vez lo juntábamos sabríamos de que se trataba. Otro nuevo reto.
Resulto ser un plano de Orihuela y decidimos irnos ha hacer turismo por la ciudad.